Me encanta llevar mi creatividad al límite. Disfruto resolviendo problemas de forma innovadora, creando o mejorando modelos de negocio y estrategias, y optimizando productos, procesos y organizaciones.
Por mi experiencia creando startups y trabajando con multinacionales, tengo una visión global que me permite entender los desafíos a los que se enfrentan las empresas en todos los niveles. Personas, estrategia, negocio y tecnología tienen que alinearse para garantizar el éxito en un mundo que cambia cada vez más rápido.
Emprender cambia tu genética profesional. Te obliga a interiorizar que el activo más importante de una empresa son las personas, su cultura, y la forma en la que colaboran. Te fuerza a tener un mindset centrado en el cliente, a plantearte que todo es siempre mejorable, a tomar decisiones basadas en datos, y a intentar ir siempre un paso por delante.
Ese es el ADN que deberían tener las grandes empresas en el contexto actual, e intento ayudar a su transformación, haciendo especial foco en las personas, cultura, estrategia y negocio.